domingo, 27 de julio de 2008

Movimiento Estudiantil de la Séptima Papeleta.


Unos jóvenes universitarios soñaban con cambiar el país pacíficamente. Es así como caminaron y caminaron hasta encontrar el sendero, de lo que se llamo la marcha del silencio.

Después de la incertidumbre, los acuerdos, las deliberaciones, las mesas de trabajo, era una idea de todos y todas, donde los desacuerdos se convirtieron en metas, mostrando en ese momento de la historia que “la constituyente es el camino”.

La séptima papeleta fue un hecho importante. Allí la ciudadanía decidía sobre diversos aspectos, razón por la cual la séptima votación nació de la espontaneidad ciudadana, liderada por los estudiantes como algo natural, impulsado por el movimiento estudiantil colombiano con la introducción de una papeleta adicional en unas elecciones, situación tenida en cuenta como un hecho político. Este acontecimiento del 11 de marzo de 1990, fue contabilizado por los estudiantes, dio paso a una serie de decisiones políticas y jurídicas que facilitaron el proceso pre-constituyente o sea anterior a la Constitución de 1991.

El voto, antes de la Constitución de 1991, estaba amarrado, pues los mismos partidos lo suministraban y ello no era democrático para decidir libremente por quién votar. Esas seis votaciones se realizaron de la siguiente forma:

Una papeleta por la Consulta del Partido Liberal: Candidato Presidencia de la República.
Una para elegir Alcalde Municipal.
Por lista de candidatos al Senado de la República para el periodo constitucional de 1990 a 1994.
Otra para la Cámara de Representantes para el periodo constitucional de 1990 a 1994.
Otra para la Asamblea Departamental para el periodo constitucional de 1990 a 1992.
Voto para el Concejo Municipal para el periodo 1990 a 1992.
(…) Y la llamada Séptima Papeleta que decía: VOTO POR COLOMBIA
SÍ A LA ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE CUYA FORMA DE INTEGRACION Y FUNCIONAMIENTO CONSULTE EL INTERÉS DEL PUEBLO COLOMBIANO.

1 comentario:

Javier dijo...

Hola, quiero saber si este acto es legal, o tiene repercuciones legales, por que fuera de repartir en la familia y amigos, podemos ir a los puestos de votación y dar la papeleta.